Para mí es lo más fácil del mundo ser vegano. Me encanta la esencia de eso. Me encanta la comida deliciosa y la salud que trae. Me encanta que no le quita nada a ningún otro ser vivo. No es caro ni pretencioso. Simplemente es. Me encanta la ausencia de todos los alimentos sin sentido que abundan y la falta de desperdicio. Entonces, muchas verduras, frutas, belleza en mi plato.
Vivo intuitivamente y siempre lo he hecho. No les presentaré mi doctorado en nutrición porque no existe. Pero, poseo un doctorado en mí. Estoy calificado para hablar con autoridad sobre lo que hago, cómo pienso, mis elecciones, mis pensamientos, mis intenciones y eso es lo que haré.
He conocido nutricionistas que, con todo su conocimiento, eran un desastre para la salud. Con todo ese conocimiento sobre lo que puede dañar el cuerpo, participarían de todo lo que lo hacía. Tenían las credenciales, pero nada más. Al crecer yo era un bailarín. Yo era consciente de mí mismo. Aun lo estoy. Nunca he puesto nada en mi cuerpo que impida su capacidad de curarse a sí mismo. Es desde este punto de vista que hablo. Es bastante accesible ser vegano. Hay tantas opciones para hacer alimentos deliciosos y nutritivos. Lo hago para mi hija y le gusta. Compartiré muchas de las cosas que disfrutamos. Rutinas matutinas y elecciones saludables.
Batidos de la mañana.
Disfruto el hecho de que comer de esta manera me hace más receptivo a los sutiles sabores subyacentes que esconden los alimentos condimentados, fritos, salados y azucarados.
Entrantes de la mañana: Batidos
El verde oscuro es uno de mis favoritos compuesto por muchos ingredientes diferentes.
Batido de Mango Verde Matcha — El tesoro en este batido para mí es el aguacate que le da a todo lo que toca una consistencia suave y aterciopelada y muchos nutrientes ricos y grasas saludables para tu salud.
2 tazas de verduras (1/2 col rizada/1/2 espinaca)
1 taza de jugo de mango
1/2 aguacate
2 cucharaditas de té verde matcha en polvo —
1 cucharadita de maca en polvo
(El polvo de maca proviene de la maca, un tubérculo de la familia de los rábanos que crece en los Andes)
La belleza de comer vegano es la ausencia de todas las cosas no saludables en tu dieta. No tengo que tener conversaciones conmigo mismo sobre nada de lo que como, ya que todo está bien. Ya es bastante difícil cuidar de nosotros mismos en un mundo donde abunda la toxicidad de todo tipo. Entonces, ¿por qué no hacer que lo que comes sea prístino y puro, natural y amable, predecible y hermoso?
